6 AÑOS SIN AGUA

Soy un desaguado, un sinagua. En seis años y dos periodos municipales no he logrado que la ilustre corporación se digne compartir conmigo el agua que pródigamente reparte el camión municipal a todos mis vecinos. Durante la anterior administración fui debidamente inscrito, pero jamás fui encuestado ni en mi domicilio ni en mi lugar de trabajo, por lo que no recibí el beneficio. ¿Desidia funcionaria? ¿Razones políticas? No lo se. Durante la era Valencia se me ha informado que mi antiguo registro no está y que actualmente no hay presupuesto para nuevas inscripciones.
La última negativa la recibí hoy día, porque según la funcionaria que me atendió “hay que estudiar los casos nuevos, pero de todas formas no se está inscribiendo gente para el beneficio”.
Hace dos semanas le pedí al concejal Tito Vega que hiciera las consultas respectivas y le expliqué el problema que me aqueja: llevo viviendo y trabajando seis años en Ventanas, pero aún no cuento con el vital elemento, pese a que estoy en la ruta del camión.

Aún no recibo respuesta del amable concejal que en su publicidad me pide que “vote seguro” por él.

Quizá no tiene que ver una cosa con la otra, pero en un periodo de excesivos gastos electorales en que se dilapidan millones de pesos en propaganda, duele constatar que las pequeñas necesidades de la gente, de cierta gente, a veces no son tan importantes. Tampoco sirve de mucho pagar permisos de circulación y patentes comerciales, que se supone sirven para el “desarrollo comunitario” ya que en casos como el mío, aún debo esperar a que “haya presupuesto” para poder mendigar unos cuantos litros de agua.

A.P.